El ciclón tropical Erick avanza por México

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La tormenta siguió su trayectoria en dirección a la ciudad de Acapulco. A su paso por la costa del sur mexicana dejó inundaciones, deslaves y escombros arrastrados por la marea.

El ciclón tropical Erick avanzó el jueves en dirección a la ciudad de Acapulco, en México, como huracán de categoría 1. A lo largo de su trayectoria por la costa sur mexicana, dejó inundaciones, deslaves y escombros arrastrados por la marea.

El ciclón tocó tierra como huracán de categoría 3 hacia las 6 a. m., hora local, en el oeste de Oaxaca, con vientos de alrededor de 200 kilómetros por hora, lo que significa un ligero debilitamiento respecto a su categoría 4 de solo unas horas antes.

Incluso antes de que Erick tocara tierra, las autoridades mexicanas habían habilitado miles de albergues, ordenado algunas evacuaciones y puesto en alerta máxima a la región ante una huracán que potencialmente se iría debilitando. Hace dos años, el huracán Otis se intensificó con rapidez hasta convertirse en un huracán de categoría 5 en cuestión de horas --devastando los hoteles, viviendas y el puerto de Acapulco-- y los meteorólogos habían temido que Erick también registrara un abrupto cambio similar.

Al final, no alcanzó esa fuerza, pero las autoridades reportaron algunos daños el jueves por la mañana, cuando las lluvias fuertes azotaron la costa. En el estado de Oaxaca, un hospital, calles y estaciones eléctricas se encontraban entre las estructuras dañadas. Los deslaves provocaron que dos carreteras cerraran, dañaron viviendas y causaron que al menos un hombre resultara herido, según las autoridades de emergencias.

La playa de Puerto Escondido amaneció el jueves con un paisaje repleto de escombros y basura, en su mayoría botellas de plástico que el agua arrastró a su paso.

Unas 200 personas tuvieron que acudir a albergues en Santiago Pinotepa Nacional por la crecida de las aguas, informaron las autoridades el jueves temprano, y los servicios de electricidad e internet sufrían cortes en varias ciudades de Oaxaca.

La Comisión Federal de Electricidad informó que más de 120.000 usuarios habían resultado afectados por un apagón. También se interrumpió el servicio de telefonía celular, ya que las redes resultaron dañadas.

Unas 200.000 personas viven en la trayectoria del huracán en Oaxaca, según informaron las autoridades el jueves por la mañana, aunque se espera que la tormenta siga perdiendo velocidad a medida que se acerque a Acapulco.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dijo que se esperaba que Erick provocara entre 150 y 200 milímetros de lluvia en la mayoría de los lugares, y hasta 400 milímetros en algunas zonas, principalmente en Oaxaca y Guerrero. Advirtió que se esperaban graves inundaciones y deslaves peligrosos, sobre todo en zonas montañosas o accidentadas.

Los vientos extremadamente fuertes y dañinos también constituían un peligro, y se esperaba que el fuerte oleaje afectara la costa del sur de México a lo largo del jueves.

"Si están en zonas bajas, cerca de ríos, cerca de cauces, es mejor que vayan a los refugios ya dispuestos, a los albergues que ya están dispuestos para esta situación", dijo la presidenta Claudia Sheinbaum en una conferencia de prensa el miércoles por la mañana. "Todas aquellas personas que tienen embarcaciones, que no salgan".

Esther Martínez Hernández, de 50 años, propietaria de una embarcación en Puerto Escondido, lamentó la respuesta aletargada de las autoridades municipales.

Dijo que los funcionarios estaban al tanto de los efectos del huracán y, a pesar de las peticiones de ayuda de los residentes, nadie acudió a ayudar a remolcar las embarcaciones que quedaron varadas después de que Erick tocó tierra en la zona.

"Nos dejaron solos. Ahora estamos acá remolcando las embarcaciones entre todos los pescadores", dijo el jueves por la mañana, cuando pescadores y dueños de restaurantes fueron a inspeccionar sus embarcaciones y negocios para informar de las pérdidas en sus propiedades. "Yo no tenía 800 pesos para remolcar mi lancha, y así pasó con varios de mis compañeros".

Se habilitaron más de 2000 refugios temporales en Guerrero, Oaxaca y el cercano estado de Chiapas, según informó el Gobierno mexicano en un comunicado a medida que se acercaba la tormenta.

Erick también inundó las calles de Salina Cruz, un importante puerto marítimo de Oaxaca, lo cual dejó automóviles varados el miércoles. La policía de Oaxaca y la de Guerrero estaban ayudando a los conductores y retirando rocas y ramas de las carreteras.

Siete comunidades afromexicanas del municipio de Villa de Tututepec resultaron afectadas por la tormenta, con inundaciones de viviendas por el agua de lluvia y afectaciones en rutas de transporte. El presidente municipal de Villa de Tututepec, Eder Muñoz Peña, dijo que trabaja con los afectados y las autoridades locales para realizar labores de limpieza.

Erick, que se formó el martes, se fortaleció con rapidez el miércoles y alcanzó la categoría 4 poco antes de medianoche, con vientos lo suficientemente poderosos como para derribar árboles, romper ramas y destrozar techos.

El jueves, mientras las autoridades empezaban a evaluar los daños, los aeropuertos de las ciudades costeras de Huatulco y Puerto Escondido permanecieron cerrados, al igual que sus puertos. También se suspendieron las líneas de transporte, incluidas las que se dirigían a la capital, Oaxaca, debido a los deslaves.

Erick es el quinto ciclón tropical con nombre que se forma este año en el Pacífico oriental. La temporada de huracanes del Pacífico, al igual que la del Atlántico, se extiende hasta el 30 de noviembre.

Elda Cantú , editora en la oficina de Ciudad de México, escribe El Times, el boletín en español del periódico. También cubre la actualidad de México y Centroamérica.

John Yoon es un reportero del Times radicado en Seúl que cubre noticias de última hora y de actualidad.

Nazaneen Ghaffar es una reportera del Times en el equipo de Tiempo.